Mostrando entradas con la etiqueta compasión. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta compasión. Mostrar todas las entradas

miércoles, 19 de marzo de 2025

Para qué he vivido




Hoy, un H. muy querido me hizo llegar este texto extraordinario. Su lectura me impactó profundamente y resonó en mi interior de una manera que me llevó a reflexionar. Las ideas que encontré en él me parecieron tan valiosas que sentí la necesidad de compartirlas contigo, esperando que también te inspiren y te inviten a la reflexión.

"Para qué he vivido, por Bertrand Russell

[PÓRTICO]

 Tres pasiones simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por el sufrimiento de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación.

He buscado el amor, primero, porque conduce al éxtasis, un éxtasis tan grande, que a menudo hubiera sacrificado el resto de mi existencia por unas horas de este gozo. Lo he buscado, en segundo lugar, porque alivia la soledad, esa terrible soledad en que una conciencia trémula se asoma al borde del mundo para otear el frío e insondable abismo sin vida. Lo he buscado, finalmente, porque en la unión del amor he visto, en una miniatura mística, la visión anticipada del cielo que han imaginado santos y poetas. Eso era lo que buscaba y, aunque pudiera parecer demasiado bueno para esta vida humana, esto es lo que -al fin- he hallado.

Con igual pasión he buscado el conocimiento. He deseado entender el corazón de los hombres. He deseado saber por qué brillan las estrellas. Y he tratado de aprehender el poder pitagórico en virtud del cual el número domina al flujo. Algo de esto he logrado, aunque no mucho.

El amor y el conocimiento, en la medida en que ambos eran posibles, me transportaban hacia el cielo. Pero siempre la piedad me hacia volver a la tierra. Resuena en mi corazón el eco de gritos de dolor. Niños hambrientos, víctimas torturadas por opresores, ancianos desvalidos, carga odiosa para sus hijos, y todo un mundo de soledad, pobreza y dolor convierten en una burla lo que debería ser la existencia humana. Deseo ardientemente aliviar el mal, pero no puedo, y yo también sufro.

Ésta ha sido mi vida. La he hallado digna de vivirse, y con gusto volvería a vivirla si se me ofreciese la oportunidad."


El eco de las pasiones: Una reflexión sobre el legado de Russell y el sentido de la vida

El texto de Bertrand Russell, un susurro que ha viajado a través del tiempo, ha resonado en mi alma como un eco profundo. "Tres pasiones simples, pero abrumadoramente intensas..." y así, el filósofo nos invita a un viaje íntimo a través de su existencia, un viaje que, en su esencia, es el viaje de todos nosotros.

¿Para qué vivimos? Esta pregunta, tan antigua como la humanidad misma, encuentra respuestas diversas en el corazón de cada individuo. Russell, con su honestidad brutal, nos revela las suyas: el amor, el conocimiento y la piedad. Tres pilares que sostuvieron su vida, tres faros que iluminaron su camino en medio de la oscuridad.

El amor, esa fuerza primigenia que nos arrastra hacia el otro, que nos hace sentir completos, que nos muestra la belleza de la conexión humana. Russell lo describe como un éxtasis, un gozo tan intenso que justifica la existencia misma. ¿Quién no ha experimentado esa chispa, esa llama que enciende el alma y nos hace sentir vivos? El amor nos rescata de la soledad, ese abismo frío e insondable que nos acecha, y nos muestra un atisbo de paraíso en la tierra.

El conocimiento, por su parte, es la sed insaciable que nos impulsa a explorar el mundo, a desentrañar sus misterios, a comprender la esencia de las cosas. Desde la inmensidad del cosmos hasta la complejidad del alma humana, el conocimiento nos invita a un viaje sin fin, un viaje que nos enriquece, nos transforma y nos permite dejar nuestra huella en el mundo. ¿No es acaso el conocimiento la herramienta que nos permite construir un futuro mejor?

Pero no podemos olvidar el dolor, el sufrimiento que nos rodea, la injusticia que nos indigna. La piedad, esa voz que clama por los oprimidos, por los desfavorecidos, por los que sufren, nos recuerda que somos parte de una humanidad compartida, que el dolor de uno es el dolor de todos. Russell, con su corazón compasivo, nos muestra la importancia de la empatía, de la solidaridad, de la lucha por un mundo más justo y equitativo.

Y es que la vida, como bien lo sabía Russell, es una mezcla de luces y sombras, de alegrías y tristezas, de amor y dolor. No podemos escapar del sufrimiento, pero podemos elegir cómo enfrentarlo. Podemos elegir amar, aprender, crecer, luchar. Podemos elegir vivir con pasión, con valentía, con esperanza.

El legado de Russell nos invita a reflexionar sobre nuestras propias pasiones, sobre los pilares que sostienen nuestras vidas. ¿Qué nos mueve? ¿Qué nos impulsa a seguir adelante? ¿Qué huella queremos dejar en el mundo?

La respuesta, como siempre, reside en nuestro interior. En la búsqueda constante de sentido, en la construcción de una vida que valga la pena ser vivida. Porque, al final, lo que importa no es cuánto tiempo vivimos, sino cómo vivimos.

martes, 12 de abril de 2022

Viaje a la ¡victoria!

En la vida, no es sólo con la victoria que vencemos. Incluso nos beneficiamos de la simple participación si sabemos aprovechar el aprendizaje durante nuestro camino. La vida es una lucha constante, y cada día es una batalla, ya sea dentro de nosotros mismos, en la sociedad o, de manera especial, en nuestra propia familia.

Cuando tenemos un ideal, ganar y perder es parte del juego, porque lo que cuenta es el entrenamiento y la experiencia que adquirimos, y es lo que nos fortalece en el día a día, acercándonos al logro de la meta.

Pero, para el alcance definitivo de la meta y la victoria, existen valores invisibles a los ojos, pero sensibles e indispensables para el corazón, porque estos son los valores que traerán consigo la nobleza, la dignidad y la verdad. placer por la conquista.

Y en nuestro viaje, la cualidad de la victoria solo se logrará si los valores de honestidad, respeto, amistad, compañerismo y amor están arraigados en ella. Y no compramos estos valores, tenemos que conquistarlos a lo largo de nuestro viaje por la vida.

¡No cometer errores! ¡Las victorias logradas a costa de la mentira, el engaño y el engaño no tienen valor, y se diluirán con el tiempo y con el calor de la verdad, en lo que comúnmente se define como una “victoria pírrica”!

A partir de este martes, consolidemos cada vez más nuestras victorias diarias en las estructuras inquebrantables de la verdad, la honestidad y el amor fraterno. ¿De qué sirve una “victoria” si no podemos descansar en paz sobre ella?

Gracias

sábado, 1 de agosto de 2020

Domina tus emociones


Podemos sentir las formas más diversas de emociones: ira, anhelo, melancolía, tristeza, miedo, ansiedad, etc.

 

La emoción revuelve el espíritu, acelera o reduce el orden mental, provocando un desequilibrio en nuestras acciones y reacciones. En esos momentos, debemos esforzarnos por dominar la mente.

 

El dominio de la mente comienza cuando detenemos las palabras y medimos cada oración pronunciada, dentro de una atmósfera de absoluta normalidad. Para hacer esto, debes pensar despacio, calmar tus palabras y ser paciente.

 

De esta manera, llegaremos a la serenidad necesaria para controlar la situación, ordenar palabras con equilibrio y superar las crisis emocionales.

 

Lo que sale de la boca es la fuerza creativa y no hay forma de hacer que regrese. Por lo tanto, pensemos detenidamente antes de hablar, evitemos los excesos, rijámonos por la verdad y el sentido común, regulemos el tono de nuestra voz y no seamos groseros.

 

No cobramos represalias ni buscamos responsables. Si nuestra mente busca soluciones, nos volvemos positivos. Y si busca razones, nos volvemos negativos. Por lo tanto, pasemos más tiempo conscientes que soñando, haciendo que planeando, viviendo que esperando.

 

Recordemos con serenidad que: "La franqueza no consiste en decir todo lo que se piensa, sino en pensar todo lo que se dice".

 

¡Un abrazo!


martes, 28 de julio de 2020

AMOR verdadero


Si queremos ser felices, amémonos.

La mayoría de la gente no sabe el verdadero significado del amor. Limitan su amor a las pasiones o sentimientos que tienen cuando están enamorados. El amor es un sentimiento amplio que no se limita a una sola persona.

Por supuesto, el amor del esposo o la esposa se confunde con el placer y la alegría, pero en realidad, el amor es un sentimiento de sacrificio, practicado por personas dispuestas a renunciar a los deseos personales en beneficio de otras personas.

Mientras las personas no definan el amor, hasta que se den cuenta de que el amor es algo que no depende de la posesión, el egocentrismo, la planificación, el miedo a perder, la necesidad de ser correspondido, el amor no será amor.

El amor requiere abnegación, renuncia, otorgamiento y compasión. No busca riquezas o vanidades y se completa haciendo el bien y brindando momentos de felicidad a nuestro prójimo.

El amor es transparencia, pureza. No es falso y está unido con la verdad como dos caras de la misma moneda y es imposible separarlas. El amor es el resultado de nuestra comprensión de la espiritualidad divina que existe en todos nosotros.

Si queremos menos violencia en el mundo, más armonía entre las personas, menos envidia, celos, egoísmo, orgullo y más tolerancia, creemos más amor en nuestros corazones.

Este martes, recordando al apóstol Pablo, asegurémonos de que siempre quedarán tres cosas: fe, esperanza y amor. Pero el más grande de todos es el amor.

¡Un abrazo!

jueves, 23 de julio de 2020

Escoger bien




Las cosas malas no son lo peor que nos puede pasar. Lo peor que nos puede pasar es que NADA suceda.

Una vida fácil, sin sacrificios, sin obstáculos, nada nos puede enseñar, porque lo que importa es lo que aprendemos. Lo que aprendemos y cómo nos desarrollamos ante las dificultades.

Trazamos nuestras vidas por el poder de nuestras elecciones. Un pequeño cambio hoy puede conducir a un mañana profundamente diferente. Las recompensas son excelentes para aquellos que tienen el coraje de cambiar, pero estas recompensas no llegan de repente o de la noche a la mañana.

El premio por nuestras buenas elecciones proviene de nuestro trabajo, de la confianza que tenemos en nuestra capacidad y de nuestra persistencia en alcanzar las metas que establecemos. Nuestros resultados son el resultado de nuestras elecciones. Y se necesita tiempo y paciencia.

Generamos nuestros propios medios y obtenemos exactamente lo que buscamos. Somos responsables de la vida que creamos nosotros mismos. ¿Quién será el culpable o quién será elogiado, si no nosotros mismos?

Tomemos un tiempo, reflexionemos y hagamos una pregunta: ¿quién puede cambiar nuestras vidas en cualquier momento, si no nosotros mismos? Dios quiere que seamos felices y, por eso, nos ha dado el mayor bien, además de la vida, el libre albedrío. ¡Escojamos bien, por lo tanto!

martes, 7 de julio de 2020



No es difícil encontrar personas que, debido a la tristeza que llevan, parecen estar viviendo "por obligación".
De hecho, apenas "viven", simplemente "sostienen" la vida, viven con desánimo, desesperanza y la triste espera del "fin".
Con estas personas, sin embargo, y sin que se den cuenta, la vida sigue siendo exuberante, enseñando y elevando a quienes se regocijan con ella.
Creo que ha llegado el momento de tener un buen espíritu y trabajar para buscar la alegría y la energía que existe en todo.
Entonces, no nos dejemos frustrar con la vida. Si parece rutinario, con los días siempre iguales, con todo para repetir, escapémonos de esta ilusión.
La vida nunca es igual. Los días, las horas y los minutos nunca serán los mismos. Transformamos nuestras vidas, cuando observamos lo que sucede a nuestro alrededor y decidimos concluir buenas experiencias, alegrías y esperanzas.
Entonces, incluso si nos cuesta algo, vivamos felices. La vida es un espejo donde vemos lo que hacemos de nosotros mismos.
Reflexionemos bien este tema y decidamos con firmeza: "Trataré bien mi vida, porque esta responsabilidad es solo mía y soy capaz".
Sé feliz siempre.



domingo, 5 de julio de 2020

Gratitud





No todas las personas tienen la costumbre de agradecer. Cuando lo hacen, es casi siempre, porque algo les ha traído alegría, ventaja o éxito.
Olvidamos los beneficios que provienen de los fracasos, las experiencias que producen, los males que nos afligirán  en el futuro y el crecimiento interno que proporcionan.
Los errores y los infortunios son inherentes a la vida. Son como la pimienta en una comida: una pizca agrega un sabor especial a todo el plato.
Siempre ¡¡tratemos de agradecer!! no solo por los éxitos y los aplausos, sino también por las experiencias negativas, fracasos y dificultades.
Cuando hacemos eso, damos un paso adelante, saltamos a una etapa superior de evolución. Aceptar obstáculos e intentar crecer con ellos nos da nuevas fuerzas y recursos, y nos hace querernos y admirarnos más, fortaleciendo nuestra autoestima.
En cualquier momento que estemos pasando, mantengamos buenos pensamientos sobre la vida, sobre Dios y sobre nuestros semejantes. Como semillas de felicidad, las buenas obras darán fruto, ayudándonos a evitar los malos fluidos y acercándonos al Creador.
¿Qué tal, si comenzamos a recordar más que cada vez que damos gracias, la vida registra un punto a nuestro favor? ¡Vale la pena!


miércoles, 1 de julio de 2020

¡No te rindas!




Hay momentos en la vida en los que nos encontramos en un cruce de carreteras sin saber qué dirección tomar, porque hay muchos caminos.

En estos momentos de incertidumbre, dudas e inseguridades, es inútil ir sin rumbo, es aconsejable ser cauteloso con paciencia y esperar el momento adecuado para avanzar con seguridad.

Dejemos ir la tensión y la desesperación y tomemos posesión de la brújula del discernimiento para tomar la decisión más sabia respaldada por nuestra fe y confianza en nosotros mismos.

A menudo, en las horas de tensión y angustia, no escuchamos nuestra intuición, y ahí es donde nos sentimos perdidos, desanimados y, a veces, perdiendo la fe y debilitando nuestro espíritu.

¡No te rindas! Busquemos la poderosa fuerza de Dios y no nos dejemos engañar pensando que estamos solos y abandonados. ¡No lo estamos! Dios nunca abandona a sus hijos. ¡La fe y la perseverancia es la clave!


lunes, 29 de junio de 2020

Confía en Él



Siempre debemos estar preparados para lo inevitable. Hay situaciones en la vida que no se pueden cambiar y, en otras circunstancias, ni siquiera se pueden evitar. Y por difícil que sea aceptarlos, es necesario saber cómo vivir con ellos.

La aceptación de un episodio de tristeza o angustia hará que el dolor sea más agradable, y llamamos a esto resignación. Y renunciar no es lo mismo que ser conformista, que acepta pasivamente todo. ¡No es!

Tener resignación es tener humildad, comprensión y paciencia. Por eso es muy importante saber cómo lidiar con hechos y situaciones en las que se puede hacer poco o nada. Rebelarse contra la Ley de la vida y contra Dios no es la actitud de quienes dicen creer en Él.

Somos probados durante todo el viaje terrenal, y debemos pasar estas pruebas porque no nos quedaremos en este viaje para siempre. Recordemos que somos estudiantes de la vida y será necesario y bueno que podamos obtener la aprobación.

Renunciemos y confiemos en el Maestro de Maestros, que es Dios, porque de Él recibimos las mejores lecciones de resignación y ennoblecimiento, en la certeza de la recompensa de la dicha eterna.

Recordemos, que el sufrimiento mejora nuestro espíritu y nos proporciona ricas lecciones de vida.

martes, 23 de junio de 2020

El poder de la palabra



Podemos sentir las formas más diversas de emociones: ira, anhelo, melancolía, tristeza, miedo, ansiedad, etc.

La emoción revuelve el espíritu, acelera o reduce el orden mental, provocando un desequilibrio en nuestras acciones y reacciones. En esos momentos, debemos esforzarnos por dominar la mente.

El dominio de la mente comienza cuando detenemos las palabras y medimos cada oración pronunciada, en una atmósfera de absoluta normalidad. Para eso, debes pensar despacio, calmar tus palabras y ser paciente.

De esta manera, llegaremos a la serenidad necesaria para controlar la situación, ordenar palabras con equilibrio y superar las crisis emocionales.

Lo que sale de la boca es la fuerza creativa y no hay forma de hacer que regrese. Por lo tanto, pensemos detenidamente antes de hablar, evitemos los excesos, que la verdad y el sentido común, regule el tono de nuestra voz y no sea grosero.

No cobramos ni buscamos responsables. Si nuestra mente busca soluciones, nos volvemos positivos. Y si busca razones, nos volvemos negativos.

Por lo tanto, pasemos más tiempo dándonos cuenta que soñando, haciendo que planeando, viviendo que esperando, porque, aunque casi muere, está vivo, casi vive, ya ha muerto.

Recordemos, con serenidad que: "La franqueza no consiste en decir todo lo que se piensa, sino en pensar todo lo que se dice".

viernes, 30 de marzo de 2018

La felicidad comienza a los 50



A más edad, más felicidad. Tal afirmación se sustenta en recientes investigaciones que acaban con el mito de que la vejez es sinónimo de decadencia. No obstante, es cierto, tal y como asegura Laura Carstensen, del Centro de Longevidad de Stanford, que la vejez conlleva la aparición de algunas dificultades: descenso de estatus, menos ingresos económicos, enfermedades… Pero no todo son pérdidas, también hay ganancias: disfrutamos de los aprendizajes de la experiencia y del conocimiento adquirido, al tiempo que mejoramos en los aspectos emocionales.
Una encuesta de Gallup demuestra cómo a partir de los 50 la felicidad suele estar más al alcance de la mano. Arthur A. Stone, de la Universidad Estatal de Nueva York, en 2008 dirigió el estudio, para el que entrevistó a más de 340 mil personas en Estados Unidos, entre 18 y 85 años. Las preguntas tocaban temas, como situación económica, salud, sexo y bienestar general, entre otros.
Al final de la encuesta se incluía una pregunta en la que tenían que decir, si habían experimentado el día anterior alguno de estos sentimientos: felicidad, estrés, preocupación, enfado, tristeza y satisfacción. Lo que la investigación encontró fue que a los 18 años las personas nos sentimos muy bien, pero a medida que vamos cumpliendo años empiezan a aparecer dificultades en el camino que atacan a nuestro estado de ánimo. Y esta es la tónica general hasta que cumplimos los 50 años, momento en el que comienza a verse la vida de otra manera y elevarse el ánimo. A los 85 años, las personas entrevistadas mostraron una plenitud y satisfacción consigo mismas que superaba con diferencia la de los 18 años. A partir de los 50 son menos los momentos en los que aparece la ira, aprendemos a llevar mejor las preocupaciones y ganamos en disfrute y felicidad.
Son muchas y muy diversas las investigaciones sobre cómo nos afecta el hecho de cumplir años. Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades preguntaron en una encuesta en 2003, si habían sentido algún tipo de malestar psicológico durante la semana anterior, y las personas que estaban entre 45 y 64 años respondieron de manera afirmativa muy por encima de los que eran mayores de 65 años.
El equipo de Carstensen hizo una investigación en la que estudiaban la evolución de un grupo de 184 personas que iban desde los 18 a los 94 años, durante 10 años. Lo que pretendían ver es cómo cambiaban sus experiencias emocionales a medida que envejecían, estudiando su frecuencia, estabilidad y complejidad en la vida diaria. Para ello las personas recibían llamadas de los investigadores de manera aleatoria y en cada llamada debían valorar en una escala de 1 a 7 su estado de felicidad, tristeza y frustración. A medida que envejecían las personas informaban de experiencias más positivas y los sentimientos negativos se iban reduciendo. En conclusión, el envejecimiento se asocia con un bienestar general emocional más positivo y con mayor estabilidad emocional. Y no solo eso, sino que además vieron cómo las personas que informaron de más emociones positivas que negativas en su vida cotidiana, vivieron más años.

Estas investigaciones aportan evidencias que derriban los estereotipos asociados al envejecimiento, como una etapa negativa y gris marcada por la tristeza y la pérdida. Pero si ganar años nos hace más felices, ¿qué hacemos con las limitaciones típicas de la vejez para no sentirnos frustrados?Diferentes autores como el psicólogo alemán Paul B. Baltes apuntan al hecho de que aprendemos a optimizar los recursos de manera selectiva mediante la compensación. De esta manera envejecer de forma exitosa implica invertir en las metas y en las diferentes situaciones, aprovechando la experiencia acumulada para compensar las limitaciones.

martes, 18 de marzo de 2014

El poder de la risa


    La risa tiene el poder de elevarnos fuera de nuestro caos y de subyugar a nuestro ego.

    Ríete de la vida tan a menudo como puedas, incluso ríete de ti mismo. Una de las mejores formas de combatir la negatividad es no tomar todo tan en serio.



miércoles, 6 de noviembre de 2013

PEQUEÑAS COSAS

1- Ese buen día, de mamá, papá o de una persona especial, que te hace sentir valorado cuando apenas empiezas la mañana.


2- Esa taza de te, café, chocolate, ese pan con mantequilla, mermelada....
ayuda

lunes, 14 de octubre de 2013

Todo a su debido tiempo

Amanecer en Estepona
Desconozco si a ustedes le pasa, pero a veces tengo la sensación de ir demasiado deprisa a los sitios, que necesito hacer más, aprovechar más el tiempo y que en un hueco que hay en la agenda hay que meter algo nuevo que hacer. Pronto algún moralista diría que tengo el riesgo de caer en el activismo. Pero eso ahora no es la cuestión. Voy al diagnóstico de los hechos y luego analizaremos cómo lo podemos arreglar.
En ocasiones tengo la impresión, como les cuento, por ejemplo cuando disfruto de un café a la orilla del mar o de una cervecita con los amigos, que debe pasar más rápido el tiempo para llegar antes a la próxima cita con la agenda. Digamos que tengo la sensación de vivir acelerado. Precisamente a la orilla del mediterráneo en una de estas tardes bellas que el otoño nos está regalando y el sol del atardecer se colorea como anaranjado me ayudó mucho precisamente un comentario que surgió sobre los bailes latinos, tango, salsa… Un, dos tres, cinco, seis, siete.
Amanecer en Estepona 2

Por mucho que queramos correr, el compás es el compás; el ritmo es el ritmo y por muy rápido que quisiéramos dar los pasos y correr más la salsa sigue con su ritmo. La vida sigue con su ritmo. Y por muy rápido que queramos hacer las cosas el sol sigue saliendo, más o menos a la misma hora, y poniéndose, más o menos a la misma hora. El ritmo que queremos imprimir a la vida pasa necesariamente por la misma vida. Por muy rápido que queramos cambiar, todo tiene su tiempo. Por muy rápido que deseemos mejorar, todo tiene su ritmo, su compás.
El tiempo está para servir de medida no para ser esclavos del tiempo, apretándolo hasta que se desemboca en el estrés, ansiedad… y finalmente depresión. Es cierto que la pereza es una tendencia que es buena desterrar. Pero una cosa es la pereza y otra es que apenas nos de tiempo de saborear todo lo que de bueno cabalga con el tiempo, todo lo que de bello nos regala el nuevo día, la jornada que progresivamente se va desplegando frente a nuestros ojos. Tenemos todo un día por delante, por eso te sugiero que lo disfrutemos a ritmo de salsa, a ritmo de vida, poniendo la atención en cada cosa que hagamos. Que ya llegará el próximo compás.

sábado, 12 de octubre de 2013

Una ocasión para crecer

 Llevo algunos años ayudando como voluntario en varias ONGs, y día a día me doy cuenta que recibo más de lo que puedo dar, cumpliéndose fielmente el axioma que que todos debemos tener presente "recogemos lo que sembramos". Es por ello que me siento en la obligación moral de traer a colación un conocido relato para abordar el tema de las limitaciones personales y "defectos". Una ocasión para crecer.
Azucena
Cuenta una historia que un cargador de agua tenía dos grandes vasijas que colgaban a los extremos de un palo que llevaba sobre los hombros. Una de las vasijas tenía varias grietas mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo camino que tenía que recorrer a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón, pero cuando llegaba, la vasija rota sólo tenía la mitad del agua.
Durante dos años esto fue así, desde luego, la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, pues se sabía perfecta. Pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección y se sentía miserable porque sólo podía hacer la
Linaria
mitad de su trabajo. Así que la tinaja quebrada habló con el aguador diciéndole: “Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir.”
Margarita

El aguador apesadumbrado, le dijo compasivo: “Cuando regresemos a la casa quiero que te fijes en las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino.” Así lo hizo la tinaja y vio muchísimas flores hermosas a los largo del trayecto, pero de todos modos se sentía apenada porque al final, sólo quedaba dentro de sí la mitad del agua que debía llevar. El aguador le dijo entonces: “¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen a tu lado del camino? Siempre he sabido de tus grietas y quise sacar el lado positivo de ello. Sembré semillas de flores a todo lo largo del camino por donde vas y todos los días las ha regado. Si no fueras exactamente como eres, incluso con tus defectos, no hubiera sido posible crear esta belleza.”

martes, 24 de septiembre de 2013

Afán de superación

Cuando te diagnostican cáncer, te extirpan un miembro... No es fácil seguir adelante, hay que tener una gran fe en si mism@ y una fuerza de voluntad a prueba de bombas para continuar con tu vida. Hay muchos momentos en el que las fuerzas físicas y psicológicas flaquean, y te planteas tirar la toalla, pero siempre hay un destello de luz en el que te das cuenta que, la vida es maravillosa y estás obligad@ a superar todos los obstáculos de la vida.
Sin duda hay historias desgarradoras, pero la vida nos demuestra que el espíritu no tiene límites, los límites nos los ponemos nosotros. Es por ello que de vez en cuando nos vemos sorprendidos con historias de superación increíbles, esta es una de ellas.
Disfruta de las imágenes y despues párate a pensar cuan importantes son los problemas que tienes.
Recibe u afectuoso saludo.

jueves, 1 de agosto de 2013

Dejar ir el ego

related teachings image