miércoles, 22 de junio de 2011

Poder

La inocencia de un niño es felicidad.


Después de pasar muchos meses hospitalizado y tener que luchar contra un cáncer, todavía de imprevisibles consecuencias, la vida te cambia por completo. Al principio se te derrumba el mundo que te has ido creando. Con el paso del tiempo, el amor de los seres queridos, mucho esfuerzo y meditación he aprendido que nunca es tarde, que siempre se puede empezar de nuevo. Ahora mismo le puedes decir basta a los hábitos que te destruyen, a las cosas que te encadenan, a las tarjetas de crédito, a las noticias que te envenenan desde la mañana, a los que quieren dirigir tu vida por el camino perdido. Ahora mismo le puedes decir basta al miedo que has acumulado durante años; porque la vida es aquí y ahora. Tenemos el poder para ser libres en este momento. El poder está siempre en el presente, porque toda la vida se concentra en cada instante, cada beso, cada sonrisa… ¡Vive y se feliz!
Emociónate con un amanecer o un ocaso.

1 comentario:

  1. Buena reflexión, sobre todo viniendo de uno que sabe, como lo dices ahí en la sidebar, que este día, este momento son un regalo.

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