Se imaginan Ustedes que un controlador aéreo o alguno de sus familiares acuda a un hospital y le digan que no le pueden atender porque todos los profesionales sanitarios están "enfermos".
Los controladores rebeldes se han apropiado de un lema de artillería antiaérea “fortis sicut mons” (fuerte cual montaña). Sus condiciones de trabajo y sus salarios no son los de un colectivo privilegiado, de los que aún quedan muchos en nuestro país, son absolutamente estratosféricos, propios de otro planeta y aplicados a unas personas con título de bachiller y conocimientos de inglés, y cuyo mérito principal parece ser un cierto grado de endogamia.
Los controladores militares realizan funciones similares con sueldo de suboficial y jornadas racionales y parecen mucho menos susceptibles a la ansiedad y a la depresión. Quizá debemos preguntarnos si la seguridad de los cielos de España debe estar en manos de personas tan susceptibles al trastorno de ansiedad generalizada que puede inducir comportamientos erráticos bajo tensión y debería motivar la incapacidad para ese trabajo y la búsqueda de un trabajo acorde con su cualificación académica.
¿Alguien se imagina que mañana los sanitarios
de todos los servicios de urgencia hospitalarios se declararan en baja por enfermedad? No. Pues ellos sí saben lo que es trabajar bajo estrés y con sueldos 10 veces menores. Y lo mismo los bomberos, los maestros, los policías, los guardias civiles, los militares en misión y, en fin, tantos servidores públicos que con frecuencia hacen de la abnegación su rojo emblema del valor.Lo que han hecho tiene un nombre: falta de ética y profesionalidad .Pero como en toda guerra los dos bandos cometen atrocidades y el gobierno no puede ocultar la parte que le toca. Recordemos que, Zapatero llegó a Moncloa prometiendo buen talante, buen rollito, y que el Parlamento se convertiría en el eje de la vida política. No ha sido así. Sólo dialoga con quienes le dan la razón, y eso no supone diálogo, sino la entrega del discrepante. Con el real decreto del estado de alarma Zapatero ha querido aparecer como un tipo duro en sus horas más bajas. Pero el español de a pie se pregunta por qué no traslada esa firmeza, por ejemplo, a sus relaciones con Marruecos, a la solución de la crisis, a la protección de las mujeres, a la eliminación del terrorismo, etc…
Existe una teoría ampliamente estudiada que dice que cuando se quiere que alguien realice un trabajo desagradable, la recompensa debe ser pequeña. Se explica porque el ser humano tiende al equilibrio, y así un trabajo desagradable con una recompensa insuficiente hace que fabriquemos una tercera "idea" conciliatoria: "Lo hago porque me gusta, es vocacional", etc.
ResponderEliminarMientras que cuando la recompensa es muy grande no se genera esta tercera idea, y la respuesta a la acción desagradable será: "Lo hago - pese a que me resulta horrible tener que hacerlo - por el dinero que cobro haciéndolo".
Bajo este silogismo preguntemos a un médico, un maestro, un policía por qué hacen su trabajo y la respuesta será "porque me gusta".
Qué opinará esta gente de su propio trabajo cobrando por ejemplo lo mismo que un médico de la sanidad pública, con 60 pacientes por día y la responsabilidad que eso implica.
¡Hay que ajustar las TAriFas!
Y que el 80% del dinero del mundo se dedique al bienestar de las personas, y no a generar más dinero, que es lo que está pasando.
Siento discrepar en lo esencial de tu punto de vista. Es cierto que la medida de fuerza adoptada por los controladores, es absolutamente desproporcionada e injusta por los resultados de la misma. Es, igualmente cierto, que los controladores son uno de los colectivos mejor retribuidos del pais. Sin embargo, no es menos cierto que con la Ley en la mano (digase Estatuto de los Trabajadores, y normas laborales concordantes), sus reclamaciones en cuanto al cumplimiento máximo de horas dispuesto normativamente -precisamente por el Mº de Fomento- al inicio de este año, son, cuando menos, jurídicamente tutelables. Si esto es así, nos encontramos con que por parte del Mº de Fomento se ha errado en los cálculos o se ha provocado intenciondamante esta situación. Y qué casualidad que se espera precisamente al Puente de la Constitución/Inmaculada -que es la fecha en la que mayores desplazamientos se producen durante el año- para meter mano al famoso decreto de "Pepiño". A poco que uno se malicie las cosas, y yo por deformación profesional, debo hacerlo a diario, algo huele a podrido en Dinamarca. Resulta que en ese mismo Consejo de Ministros se han aprobado una serie de medidas que son cualquier cosa menos política orientada a la protección del estado del bienestar (y de las que por cierto, en escasos dos meses comenzaremos a sufrir los resultados) y absolutamente contrapuestas a las máximas y principios que el Sr. del "talante progresista", el presidente del Gobierno, habia estado negando que alguna vez pudiera realizar, de forma insistente hasta hace escasamente tres meses. Y había que crear FOLLON; había que distraer la atención en otras cosas. Y para eso estaban el Sr. Rubalcaba (personaje que cada vez me recuerda más al Rasputín de la Rusia prerevolucionaria) y el Sr. Blanco, que se ha dedicado durante el último año a crear un estado de opinión contrario a este colectivo. Con este caldo de cultivo, se ha originado una situación en la que los controladores han entrado a un trapo en la forma en que estaba previsto que lo hicieran. Así llevamos diez días hablando de los controladores, y no de los problemas reales del País. Y resulta que además nos enteramos que el Gobierno está interesado en vender la gestión de determinados aeropuertos del país (precisamente los que son rentables), aunque las malas lenguas dicen que realmente será una dación en pago a los bancos ingleses y estadounidenses frente a los que AENA tiene una deuda superior a los 13.000 millones de Euros -que se dice pronto-. Y evidentemente habrá que sanear el producto bien para obtener un mayor precio de venta, bien para obtener una mayor quita de deuda en contraprestación. Si a todo ello añadimos que los controladores habían reservado el Salón del Hotel en que se reunieron el día anterior al parón (Jueves 2 de Diciembre), que el Mº del Interior cuenta con el Gran Hermano que todo lo vé y todo lo escucha (Sitel), que el Mº de Defensa había puesto en alerta al Ejecito del Aire el Viernes 3 por la mañana, podremos cuando menos poner en duda que el Gobierno no estuviera informado de lo que iba a ocurrir al menos con un par de días de antelación.
ResponderEliminarSiento discrepar en lo esencial de tu punto de vista. Es cierto que la medida de fuerza adoptada por los controladores, es absolutamente desproporcionada e injusta por los resultados de la misma. Es, igualmente cierto, que los controladores son uno de los colectivos mejor retribuidos del pais. Sin embargo, no es menos cierto que con la Ley en la mano (digase Estatuto de los Trabajadores, y normas laborales concordantes), sus reclamaciones en cuanto al cumplimiento máximo de horas dispuesto normativamente -precisamente por el Mº de Fomento- al inicio de este año, son, cuando menos, jurídicamente tutelables. Si esto es así, nos encontramos con que por parte del Mº de Fomento se ha errado en los cálculos o se ha provocado intenciondamante esta situación. Y qué casualidad que se espera precisamente al Puente de la Constitución/Inmaculada -que es la fecha en la que mayores desplazamientos se producen durante el año- para meter mano al famoso decreto de "Pepiño". A poco que uno se malicie las cosas, y yo por deformación profesional, debo hacerlo a diario, algo huele a podrido en Dinamarca. Resulta que en ese mismo Consejo de Ministros se han aprobado una serie de medidas que son cualquier cosa menos política orientada a la protección del estado del bienestar (y de las que por cierto, en escasos dos meses comenzaremos a sufrir los resultados) y absolutamente contrapuestas a las máximas y principios que el Sr. del "talante progresista", el presidente del Gobierno, habia estado negando que alguna vez pudiera realizar, de forma insistente hasta hace escasamente tres meses. Y había que crear FOLLON; había que distraer la atención en otras cosas. Y para eso estaban el Sr. Rubalcaba (personaje que cada vez me recuerda más al Rasputín de la Rusia prerevolucionaria) y el Sr. Blanco, que se ha dedicado durante el último año a crear un estado de opinión contrario a este colectivo. Con este caldo de cultivo, se ha originado una situación en la que los controladores han entrado a un trapo en la forma en que estaba previsto que lo hicieran. Así llevamos diez días hablando de los controladores, y no de los problemas reales del País. Y resulta que además nos enteramos que el Gobierno está interesado en vender la gestión de determinados aeropuertos del país (precisamente los que son rentables), aunque las malas lenguas dicen que realmente será una dación en pago a los bancos ingleses y estadounidenses frente a los que AENA tiene una deuda superior a los 13.000 millones de Euros -que se dice pronto-. Y evidentemente habrá que sanear el producto bien para obtener un mayor precio de venta, bien para obtener una mayor quita de deuda en contraprestación. Si a todo ello añadimos que los controladores habían reservado el Salón del Hotel en que se reunieron el día anterior al parón (Jueves 2 de Diciembre), que el Mº del Interior cuenta con el Gran Hermano que todo lo vé y todo lo escucha (Sitel), que el Mº de Defensa había puesto en alerta al Ejecito del Aire el Viernes 3 por la mañana, podremos cuando menos poner en duda que el Gobierno no estuviera informado de lo que iba a ocurrir al menos con un par de días de antelación.
ResponderEliminarSiento discrepar en lo esencial de tu punto de vista. Es cierto que la medida de fuerza adoptada por los controladores, es absolutamente desproporcionada e injusta por los resultados de la misma. Es, igualmente cierto, que los controladores son uno de los colectivos mejor retribuidos del pais. Sin embargo, no es menos cierto que con la Ley en la mano (digase Estatuto de los Trabajadores, y normas laborales concordantes), sus reclamaciones en cuanto al cumplimiento máximo de horas dispuesto normativamente -precisamente por el Mº de Fomento- al inicio de este año, son, cuando menos, jurídicamente tutelables. Si esto es así, nos encontramos con que por parte del Mº de Fomento se ha errado en los cálculos o se ha provocado intenciondamante esta situación. Y qué casualidad que se espera precisamente al Puente de la Constitución/Inmaculada -que es la fecha en la que mayores desplazamientos se producen durante el año- para meter mano al famoso decreto de "Pepiño". A poco que uno se malicie las cosas, y yo por deformación profesional, debo hacerlo a diario, algo huele a podrido en Dinamarca. Resulta que en ese mismo Consejo de Ministros se han aprobado una serie de medidas que son cualquier cosa menos política orientada a la protección del estado del bienestar (y de las que por cierto, en escasos dos meses comenzaremos a sufrir los resultados) y absolutamente contrapuestas a las máximas y principios que el Sr. del "talante progresista", el presidente del Gobierno, habia estado negando que alguna vez pudiera realizar, de forma insistente hasta hace escasamente tres meses. Y había que crear FOLLON; había que distraer la atención en otras cosas. Y para eso estaban el Sr. Rubalcaba (personaje que cada vez me recuerda más al Rasputín de la Rusia prerevolucionaria) y el Sr. Blanco, que se ha dedicado durante el último año a crear un estado de opinión contrario a este colectivo.
ResponderEliminarCon este caldo de cultivo, se ha originado una situación en la que los controladores han entrado a un trapo en la forma en que estaba previsto que lo hicieran. Así llevamos diez días hablando de los controladores, y no de los problemas reales del País. Y resulta que además nos enteramos que el Gobierno está interesado en vender la gestión de determinados aeropuertos del país (precisamente los que son rentables), aunque las malas lenguas dicen que realmente será una dación en pago a los bancos ingleses y estadounidenses frente a los que AENA tiene una deuda superior a los 13.000 millones de Euros -que se dice pronto-. Y evidentemente habrá que sanear el producto bien para obtener un mayor precio de venta, bien para obtener una mayor quita de deuda en contraprestación. Si a todo ello añadimos que los controladores habían reservado el Salón del Hotel en que se reunieron el día anterior al parón (Jueves 2 de Diciembre), que el Mº del Interior cuenta con el Gran Hermano que todo lo vé y todo lo escucha (Sitel), que el Mº de Defensa había puesto en alerta al Ejecito del Aire el Viernes 3 por la mañana, podremos cuando menos poner en duda que el Gobierno no estuviera informado de lo que iba a ocurrir al menos con un par de días de antelación. El resultado de todo este desaguisado: 400 o 500.000 personas bloquedas en los aeropuertos, la opinión pública centrada en un enemigo común (los malvados controladores, por supuesto), y la atención de todo el país en esta cuestión. y de paso, nos la meten doblada declarando un "estado de emergencia" completamente ilegal por inconstitucional. ¿Que mejor manera de celebrar la Constitución que cargándonosla? Hay experiencias previas que demuestran que miembros muy relevantes de este Gobierno han actuado con la misma deslealtad hacia la Constitución, el sistema democrátivo y las reglas del juego en situaciones anteriores (baste recordar el triste 11 M y los dos días que le siguieron).
ResponderEliminarAhora hay mucho listillo de salón que habla de la necesidad de la declaración del "estado de emergencia". No sé (pues hace tiempo que el polvo del camino me restó esperanza en la Justicia), si todo este cúmulo de infracciones constitucionales y legales cometidas por el Gobierno van o no a ser enmendadas por nuestros Tribunales, pero sí se que ha distraido la atención sobre la crítica (y seguramente me quedo corto con la palabra) situación de nuestra economía que ha rozado en la semana previa la intervención por parte del Banco Central Europeo, de las medidas profundamente antisociales adoptadas por el Gobierno, y descalabro absoluto del presigio (el poco que nos quedaba) internacional de España, con la política exterior más errática y desastrosa del último milenio, del descalabro de la confianza de las Grandes Empresas en la recuperación del País, y de la caida en picado de la confianza de los españoles en el Gobierno y la figura de su Presidente ZP. Los controladores han sido para este Gobierno, lo que las Malvinas fueron para el régimen argentino en sus últimos estertores. El Ministro de Fomento dijo que los ciudadanos eran los rehenes de los controladores. ¿No es más cierto que han sido la herramienta del Gobierno? Y posteriormente, cuando el tema de los controladores se va apaciguando por efecto del paso del tiempo, nos salta en la cara (que casualidad que sea el mismo día que ZP, el desparecido, comparece en el Congreso para dar explicaciones de lo sucedido e informar a este del "Estado de Alarma" decretado) el asunto del dopaje. Ya veremos en qué acaba. Follón, follón, mucho follón; que la gente permanezca distraida y no mire y se percate de lo que está ocurriendo. Para los que no lo sepan un dato que me parece muy revelador: mientras dure el estado de alarma que quieren prorrogar, no se pueden convocar elecciones. El que quiera que piense.
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