De los Gallegos, de los madrileños, de los valencianos... Las empresas catalanas venden la mitad de sus productos y servicios en el resto de España y cualquier veleidad soberanista que pueda sacar de la chistera el triunfante Artur Mas puede poner en peligro la economía de Cataluña.
Es verdad que los catalanes pagan más impuestos de los que reciben del Estado, pero no es menos cierto que el saldo comercial es muy positivo para Cataluña. Vende más de lo que compra en su relación con cualquiera de las regiones españolas.El mensaje populista de que "España nos roba" con el que nos han bombardeado los líderes nacionalistas en la campaña electoral es una gran falacia, y sólo sirve para exacerbar los ánimos de unos ciudadanos hastiados de controversias inútiles, y que han sufrido en los últimos años un fuerte declive económico, provocado por la nefasta gestión de sus gobernantes.
El gran error - a mi parecer - de las transferencias a las autonomías ha sido no conservar la Educación.
ResponderEliminarQue cada uno hable en su casa lo que quiera, pero que tanto la educación como la función pública debería hacerse en el idioma oficial del país.
Hace 30 años fué una concesión y se entendió como un gesto de apertura.
Hoy la tolerancia se ha perdido y no por parte del resto del país. El idioma se ha convertido en una barrera - y posiblemente sea la que más separe a la gente porque le impide comunicarse - y las generaciones futuras criadas en este contexto serán seguramente más radicales y más separatistas.
El patriotismo extremo, el integrismo radical, el nacionalismo a ultranza son los refugios de aquellos a quienes no les queda nada más. Eso y el no entendimiento, y tenemos la fiesta hecha.
¿Quién gana?
Pues una serie de políticos de medio pelo que seguramente se estarán frotando las manos, y que dentro de unos años celebrarán la secesión y pasarán a la posteridad como presidentes de una nueva república.
Y todo esto en un mundo en el que se eliminan las fronteras, Europa lucha por permanecer íntegra y tras el intento fallido del esperanto el inglés, el castellano y el chino siguen siendo los idiomas en los que se comunica la mayoría.
En Cataluña se favorecerá el francés como segunda lengua.·.
¿No me suena eso de algo?