En el mundo estamos esclavizados de mil
pensamientos, en el Interior está el silencio.
Me comunico conmigo mismo por primera vez,
a través de la voz del Silencio.
Y, por voluntad propia contacto conmigo
mismo, algo que aparentemente debería ser así, pero no lo es,
nunca el profano contacta consigo mismo, a no ser que se le explique por
la iniciación.
Me doy cuenta somos gigantes de Luz, pero
con pensamientos de pequeñas larvas que viven en el estiércol.
¿Cómo puede ayudar el pensamiento de una
larva de escarabajo estercolero?
Quien
tenga en sí mismo una chispa divina de Luz, que no siga pensando desde su
sombra, y recuerde que no es una lombriz sino una Ave Fénix.